Tu decides lo que ves
Si te dieras cuenta de las cosas... De que eres más importante en mi vida de lo que te crees...
Si me diera cuenta de las cosas... El problema viene cuando esperas algo en concreto de alguien, cuando inventas historias a su lado que nunca se llegan a cumplir y desaparecen en sueños igual que desaparece el humo de un cigarro. Mi gran error es pensar que puedas sentir por mi lo que yo por ti, ya que tengo entendido que si quieres a alguien te preocupas por verle, estar a su lado y sentirle, también tengo entendido que no soy ningún perro al que puedas llevar con correa, hay veces que agrada que vayan detrás de ti, porque es señal de que te piensan. No quiero atarme ni atarte, sólo tener alguien más especial que otras personas en mi vida, que el sentimiento sea mutuo y que nos perdamos las noches que haga falta con tal de encontrarnos. Que tu cabecita alocada de vez en cuando se acuerde de mi, que te apetezca beber copas de más y perdernos en la magia infinita que tenemos, y no demostramos por el miedo.
No quiero que tengas miedo, puedo ofrecerte miles de noches que no acaben sin que se rocen nuestros labios, podemos equivocarnos pero soy de los que le gusta arriesgar... Sólo necesito que me hagas entender lo mismo y sino... Todo quedara en un bonito recuerdo.
Si me diera cuenta de las cosas... El problema viene cuando esperas algo en concreto de alguien, cuando inventas historias a su lado que nunca se llegan a cumplir y desaparecen en sueños igual que desaparece el humo de un cigarro. Mi gran error es pensar que puedas sentir por mi lo que yo por ti, ya que tengo entendido que si quieres a alguien te preocupas por verle, estar a su lado y sentirle, también tengo entendido que no soy ningún perro al que puedas llevar con correa, hay veces que agrada que vayan detrás de ti, porque es señal de que te piensan. No quiero atarme ni atarte, sólo tener alguien más especial que otras personas en mi vida, que el sentimiento sea mutuo y que nos perdamos las noches que haga falta con tal de encontrarnos. Que tu cabecita alocada de vez en cuando se acuerde de mi, que te apetezca beber copas de más y perdernos en la magia infinita que tenemos, y no demostramos por el miedo.
No quiero que tengas miedo, puedo ofrecerte miles de noches que no acaben sin que se rocen nuestros labios, podemos equivocarnos pero soy de los que le gusta arriesgar... Sólo necesito que me hagas entender lo mismo y sino... Todo quedara en un bonito recuerdo.
