Perder un amigo es morir
Perder un amigo es morir, es tener el alma apagada, sin ganas de hacer
nada. Perder un amigo es sentir que el mundo ya no gira que todo se
detiene sin final, sin punto de partida. Un amigo es todo: el camino, la
luz, el corazón, los sueños que soñamos, etc. Un amigo es arriesgar con
alguien a tu lado y estar por siempre acompañados, porque un amigo es la
fe que da confianza en vivir para seguir codo a codo en la vida, el que
te ayuda a volar, el que te empuja a buscar la salida. Perder un amigo
es cortar la línea de la vida, dejar el corazón sin timón, sin saber
dónde ir, perder un amigo es quedarte sin fuerzas, sin ilusiones, con
ganas de estar con él y no poder… Porque con él has llorado y has
reído, y desde que lo pierdes es como sentirte solo.